domingo, 14 de diciembre de 2008

Esta es mi vida

Buenas tardes, soy un pesao. Y os voy a relatar mi vida, precisamente por eso, porque soy un brasas.
Ya desde pequeño, era un niño muy repipi y asqueroso. Recuerdo que mi profesor, en una ocasión, escribió una nota a mis padres, en la que se podia leer algo asi: su hijo es muy buen alumno, es inteligente como el que mas, con mucho nivel para su edad... no es necesario, que venga todos los dias a clase, para aprobar.
Durante la adolescencia, hacia carreras con mis amigos, en cuanto aparecia a su vista. Mi adolescencia fue muy rápida, siempre corriendo... si no huian de mi, huia yo de ellos. Buenas ostias me llevé.
Fui a la universidad, y me doctoré en tres carreras. Carreras largas, que yo acababa en uno o dos años. Tal cantidad de conocimientos, me sirvió, para culturizarme mucho, y para ser un entendido en, casi, cualquier tema.
Gracias a mis estudios, me llovian las ofertas de trabajo... pero, en cada empresa, duraba una semana o menos, porque mis jefes, estaban hasta los cojones de mi.
Me surgió un trabajo en una pequeña ciudad alemana, y me fui a trabajar para allí. Yo no sabia alemán, pero, qué cojones! El primer mes estuvo fenomenal... es lo que tardé en aprender a hablar el idioma germano. Mi jefe, intentó que me extraditaran a mi amada patria, acusandome de terrorismo. Tal era su estado de desesperación, que hizo quebrar su propia empresa, y prefirió verse en la calle, totalmente arruinado (incluso encarcelado), que tener que aguantarme.
A la vuelta a mi querida patria, lo vi claro. Me hice testigo de Jehová. Me expulsaron por soba.
Gracias a mis experiencias anteriores, me di cuenta, que tenia un gran don que dios me habia dado. Un don que debia aprovechar para hacer el bien. Y asi lo hice. Empecé a hacer el bien... a mi mismo. Sin importarme un cagao a quien jodiese.
Tenia una facilidad desesperante para dar la paliza a la gente, y si me lo proponia, podia sacarles de sus casillas.
Mi primera víctima fue Lord Harrington Drake de Scroto. Me acerqué a él, en un lugar concurrido (la presencia de testigos, es fundamental), y me emplee a fondo. Le di la brasa de su vida, y él, me correspondió, rompiendome dos costillas, un brazo y la mandídula. La broma le costo 70.000 libras, que pasaron directamente a mi cuenta corriente. Poco tiempo después, perdió el título de Lord.
Con mi método de chapas fructíferas, conseguí, en poco tiempo, una buena fortuna, varias empresas metalúrgicas y una agencia de viajes... a la par que me hacia, con el odio y desprecio, mas viscerales, de todo aquel que sabia de mi existencia.
Pero, yo no lo hago por dinero, que conste, es porque me gusta la conversación.
Según mi fortuna crecía, mis gustos se fueron haciendo, cada vez, mas refinados. Encontré formas de molestar, que nunca, nadie, habia imaginado. Ya no me conformaba con meter el dedo en el ojo, ahora metia el puño entero.
Mi reputación se extendió por todo el reino. Un día, la reina me mandó llamar a su presencia. Cómo me alegró aquello, por fin iba a dar una brasa real. Me preparé a conciencia. Varios dias estuve estudiando y practicando nuevos y viejos métodos... iba a ser el día mas grande de mi vida. LA MAYOR DESTRUCCIÓN DE NEURONAS, PROVOCADA POR LA CHARLA DESQUICIANTE DE UN PESAO, DE LA HISTORIA. Nerón y su arpa, Fidel Castro, Franco,...iban a ser unos pringaos a mi lado... Como me jodió la vieja. Está mas sorda que una tapia. El caso, es que, al poco tiempo, me nombró caballero... genial. Mas dinero, sin pegar ni golpe.
Hace años, descubrí lo mejor de la vida: que la picha de un famoso, te penetre por un agujero de la nariz.
Me llamo Pichadeperro Smith, soy un humilde servidor de su graciosa majestad imperial, y esta es mi vida. Te he pegado la chapa de tu vida, ya te lo advertí al principio del artículo. Lo siento, no puedo evitarlo.
Que te den por el culo.

1 comentario:

alain goicoetxea dijo...

Eres un fenómeno... ¡pesaooo!. Je, je.